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Jubilación flexible: qué es y qué requisitos hacen falta

persona revisando datos para su jubilación

¿Te has jubilado pero tienes la oportunidad de volver a trabajar y te planteas cómo hacerlo? ¿Tienes dudas sobre cómo compatibilizar tu nueva vida profesional y tu situación como jubilado? No te preocupes, puedes volver a tu actividad laboral y seguir cobrando una parte de la pensión. Para ello, solo deberás transformar tu situación en una jubilación flexible, informando a la Seguridad Social sobre tu nueva condición. 

La jubilación flexible está regulada en el Real Decreto 1132/2002, de 31 de octubre, de desarrollo de determinados preceptos de la Ley 35/2002, de 12 de julio, de medidas para el establecimiento de un sistema de jubilación gradual y flexible. Además, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ofrece todos los datos de interés relacionados con ella en su portal. Aun así, como sabemos que no siempre es sencillo entender los tecnicismo que rodean a este tipo de informaciones, a continuación te ofrecemos algunas de las claves que deberás valorar para ver si puedes acogerte a ella.

¿Qué es la jubilación flexible?

La jubilación flexible es una situación por la cual una persona que se ha retirado de la actividad profesional, decide regresar a ella mediante la firma de un contrato a tiempo parcial. El tiempo de dedicación laboral podrá ser de entre un 50% y un 75% con respecto al mismo horario que realiza un empleado que desempeña esas funciones a tiempo completo. 

Derivado de este escenario, al jubilado la Entidad gestora de su pensión le reduce la parte proporcional de la jornada efectiva que va a trabajar del dinero percibido mensualmente. A la finalización de su actividad profesional, se le volverá a calcular la cuantía de la pensión según los nuevos tramos cotizados. 

¿Cuáles son los requisitos para acceder a la jubilación flexible?

Las condiciones para poder solicitar una jubilación flexible son: 

  • Tener la condición de jubilado. 
  • Firmar un contrato a tiempo parcial, con una reducción con respecto de la jornada completa de entre un 50% y un 75% del tiempo de trabajo. 
  • Que la actividad que se va a desarrollar no sea por cuenta propia ni como trabajador del sector público. 

¿Cómo se calcula la pensión en la jubilación flexible?

Básicamente la pensión percibida por la persona que solicita la jubilación flexible se verá reducida en atención al volumen de trabajo que vaya a realizar conforme a su contrato a tiempo parcial. Si la jornada se corresponde con un 75% del horario de un trabajador a tiempo completo, la cuantía a percibir con la pensión se reducirá en un 75% y pasará a ser de un 25% de la cantidad que se venía recibiendo hasta ese momento. En el caso de que sea de un 50% se rebajará un 50%. 

Ventajas de la jubilación flexibl

Los principales beneficios de la jubilación flexible son dos: 

  • Que si una persona siente que todavía tiene energía para volver a desarrollar una actividad profesional, pueda volver a hacerlo con la tranquilidad de que se reincorporará a la vida laboral en unas condiciones menos exigentes, con la seguridad de seguir percibiendo un porcentaje de su pensión. 
  • La cotización en la jubilación flexible, un punto fundamental, ya que se suman períodos durante este nuevo tiempo como trabajador que después servirán para calcular una nueva cuantía final de pensión una vez finalice su etapa profesional. 

Inconvenientes de la jubilación flexible

La mayor desventaja a la que se enfrentan las personas jubiladas al volver a su actividad profesional es que la Entidad gestora volverá a calcular su pensión, con el objetivo de proceder a reducir la cuantía percibida hasta ese momento en atención al porcentaje de horas que va a trabajar.  

Sin embargo, esta rebaja en la cantidad que pasará a recibir desde el primer día que vuelva a desempeñarse laboralmente no será permanente, tan solo durante el tiempo que dure su contrato. Una vez concluído, la Entidad gestora volverá a recalcular su pensión teniendo en cuenta los nuevos períodos que ha cotizado. 

Diferencias entre jubilación flexible y jubilación parcial

Aunque tanto la jubilación flexible como la parcial parten de la idea de que son dos formas que permiten que los pensionistas puedan mantener una parte de su actividad profesional, la diferencia entre ambas radica en el momento en el que se solicita la compatibilidad de pensión y trabajo. En este sentido: 

  • En la jubilación flexible se produce una reincorporación del pensionista a la actividad profesional. 
  • En la jubilación parcial, el trabajador en activo reduce su jornada profesional para iniciar un camino progresivo hacia la jubilación total. 

¿Cómo solicitar la jubilación flexible?

Antes de reincorporarse a la actividad profesional, es necesario informar a la Entidad gestora para que proceda a la modificación de la pensión por incorporación a un trabajo a tiempo parcial. El motivo es que, como se ha expuesto en las líneas anteriores, será necesario calcular la nueva cuantía que cobrará la persona en el momento en el que su estatus de jubilado se transforme en una jubilación flexible. 

Trámites y documentación necesaria

Los trámites vinculados a la jubilación flexible son dos: 

  1. En el momento en el que el pensionista decide incorporarse otra vez a la actividad laboral debe comunicarlo a la Entidad responsable con el fin de que calcule la nueva pensión que empezará a cobrar a partir del primer día efectivo de actividad. 
  2. Cuando finalice su vida profesional y quiera regresar a una situación de jubilación total, será necesario que vuelva a informar a la Entidad para que recalcule su pensión en base a los nuevos períodos que ha cotizado. 

Asesoría legal: ¿Por qué contar con un abogado especializado es clave?

Contar con el acompañamiento de un abogado es tener cerca a un experto que conoce la materia, además de dominar los procesos y la burocracia asociada al caso concreto. Esto significa que tendrá un conocimiento pleno de las circunstancias propias que rodean a la persona que quiere solicitar una jubilación flexible. ¿Y por qué esto es importante? Porque aunque la información general está disponible para todos los ciudadanos, después existen particularidades propias que es necesario conocer, valorar y aplicar y es ahí cuando el consejo de un abogado cobra todo el sentido. 

Por ello, nuestra recomendación es que en estos supuestos busques el asesoramiento de un abogado que guíe tus pasos, analice tu situación y, con esa información, te ofrezca su consejo profesional. Nosotros, en Ancla Abogados contamos con 30 años de experiencia cuidando de nuestros clientes, con el único objetivo de servir de soporte cuando las leyes y la burocracia requieren de una experiencia que elimine los obstáculos del camino. 

 

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