Realizas un servicio por el que emites una factura pero ese tercero parece no interesado en proceder al pago, por lo que una pregunta surge en tu mente: ¿cómo reclamar una deuda? ¿Es necesario acudir a los tribunales o existen vías extrajudiciales que puedes agotar antes de ello? A continuación te explicamos todo lo que debes conocer sobre la reclamación de deudas.
¿Qué es el impago y por qué reclamarlo?
Por impago se entiende el incumplimiento que realiza una de las partes al no abonar la cuantía económica a la que está obligada. Este deber puede nacer como consecuencia de un fracaso empresarial o por un incumplimiento contractual, entre otros muchos. De esta forma, si quieres que se produzca el cobro en cuestión, es un paso indispensable proceder al requerimiento del pago.
Consecuencias de no reclamar un impago
El mayor riesgo que se asume al no reclamar una deuda es que la ley establece un plazo máximo de tiempo en el que podrás ejercitar dicha acción. El tiempo del que dispones aparece regulado en la Ley 1/2000, de 7 de enero, de Enjuiciamiento Civil (LEC) y, el mismo, dependerá de la naturaleza de la deuda.
¿Qué ocurre si no ejercitas tu acción en el plazo estipulado por la ley? Que caduca el derecho a reclamar la cuantía debida por lo que, aunque sea posible demostrar que esa persona ha contraído una deuda económica contigo, tú no podrás solicitar judicialmente que te la pague.
¿Qué vías se pueden seguir para reclamar un impago?
Lo hemos comentado en líneas anteriores, ante un escenario de impago es fundamental iniciar el proceso para reclamar que se produzca su pago efectivo ya que, no hacerlo, podría conllevar que en el futuro no pudiéramos solicitar al deudor la citada cantidad. Por ello, es fundamental conocer los procedimientos legales para el cobro de deudas a los que podemos recurrir.
Vía extrajudicial
Es aquella que se realiza fuera del ámbito judicial. Implica la emisión de una petición formal, por parte de la persona perjudicada por el impago, para que se ejecute el abono de la cuantía debida en un plazo determinado.
Vía judicial
Es el camino que se desarrolla en un tribunal o juzgado. El procedimiento vendrá determinado en función del tipo de deuda que se esté reclamando.
¿Cómo reclamar impagos por vía extrajudicial?
Tal y como hemos comentado en el epígrafe anterior, la vía extrajudicial es aquel proceso que se desarrolla antes de implicar a los juzgados y/o tribunales. Sin embargo, que no se lleve a cabo por el camino judicial no significa que no requiera del acompañamiento de un abogado que asesore el proceso en cuestión.
Pasos para reclamar un impago de forma extrajudicial
Partiendo de que siempre tendrás que tener la documentación correspondiente que demuestre que, efectivamente, esa persona mantiene una deuda económica contigo, la vía extrajudicial se fundamenta en realizar una reclamación del impago de una manera en la que quede demostrado que, realmente, se ha producido la petición, como podría ser el correo certificado. Durante este proceso, será necesario ofrecer un modo y un plazo para realizar el abono que, de cumplirse, dará por extinguida la deuda, además de exponer a la persona interpelada las consecuencias de no hacerlo.
¿Cuándo no es efectiva la vía extrajudicial?
Esta estrategia, de dar una oportunidad de cumplir con sus obligaciones al deudor antes de implicar a un juez en el proceso, siempre denota buena fe por parte del demandante. La razón es que pone de manifiesto sus intentos por ofrecer al deudor una solución que no implique a los tribunales. Pero, en aquellos supuestos en los que ya ha manifestado que solo abonará la cantidad solicitada si un juez le obliga a ello, es muy probable que la reclamación extrajudicial resulte ineficaz.
¿Cómo reclamar impagos por vía judicial?
Cuando se ha intentado, sin éxito, reclamar el impago al deudor el único camino disponible es acudir a la vía judicial, para que un juez decida si es legítima nuestra solicitud y, de así estimarlo, proceda a obligar a la persona al abono de la cuantía.
Pasos para reclamar un impago de forma judicial
El primer paso es documentar adecuadamente la deuda, así como los intentos efectuados por el demandante de reclamar la misma antes de acudir a la vía judicial. Por ello, en el epígrafe en el que hablamos de la vía extrajudicial te señalamos la importancia de elegir un medio que deje constancia de las comunicaciones realizadas.
Tipos de procedimientos judiciales para reclamar impagos
Los procedimientos judiciales para reclamar un impago dependen del origen de la deuda en cuestión. De esta forma será posible acudir:
- Al proceso monitorio “quien pretenda de otro el pago de deuda dineraria de cualquier importe, líquida, determinada, vencida y exigible, cuando la deuda se acredite” mediante documento o factura (artículo 812.1 LEC).
- Al juicio cambiario “si, al incoarlo, se presenta letra de cambio, cheque o pagaré que reúnan los requisitos previstos en la Ley cambiaria y del cheque” (artículo 819 LEC).
- Al juicio ordinario, un proceso declarativo fijado, en el caso de los impagos, para “las demandas cuya cuantía exceda de quince mil euros y aquéllas cuyo interés económico resulte imposible de calcular, ni siquiera de modo relativo” (artículo 249.2 LEC).
- Al juicio verbal, un proceso declarativo establecido para “las demandas cuya cuantía no exceda de quince mil euros y no se refieran a ninguna de las materias previstas en el apartado 1 del artículo anterior” (artículo 250.2 LEC).
Para finalizar, en este apartado también se podría considerar englobado el procedimiento de ejecución cuando, la persona que ha visto satisfechas sus peticiones en un proceso judicial, reclama a los tribunales que obligue al condenado a que se cumpla con los términos fijados en la sentencia. Con el objetivo de ejecutar la misma, es posible que el juez adopte medidas como dictar una orden para embargar los bienes del deudor.
Costes y tiempos de los procesos judiciales
Aunque nos encantaría poder ofrecerte una respuesta más concreta que la que vamos a darte en las próximas líneas, lo cierto es que es imposible determinar con exactitud los costes y tiempos de un proceso judicial.
En el primer supuesto, porque depende no solo de los propios honorarios del abogado, también de si la sentencia condena al pago de los costes derivados del proceso al deudor. Con respecto a los plazos, aunque se establecen unos tiempos son muchas las causas que pueden dilatar o acelerar el proceso, por lo que lo más recomendable es preguntar a tu abogado para que realice una estimación de la duración del mismo.
¿Es mejor la vía judicial o extrajudicial para reclamar impagos?
Sentimos decirte que no existe una vía que sea mejor a la otra, de lo que podemos hablar es de fases a la hora de reclamar el impago de una deuda.
Ventajas e inconvenientes de la vía extrajudicial
Es un paso previo en el que se da la oportunidad al deudor de cumplir y abonar la cuantía debida a la persona. La ventaja es que, si acepta, la deuda estará extinguida, el proceso será mucho más rápido y menos costoso que si se sigue la vía judicial. El problema radica en que exige cierta celeridad ya que, en caso de que no se alcance un acuerdo, será necesario acudir a los tribunales para reclamar el impago y, como hemos visto, es una acción que solo se podrá ejercitar durante un periodo concreto de tiempo.
Ventajas e inconvenientes de la vía judicial
La vía judicial es el camino para reclamar el pago de una deuda, así como los posibles intereses por demora o indemnización a la que una persona pueda tener derecho en caso de impago, cuando la extrajudicial no ha surtido efecto. El inconveniente está asociado a los gastos que se puedan derivar, así como a los plazos de demora a los que puede estar sometido un proceso judicial.
En conclusión, lo más recomendable es dejarse asesorar por abogados especializados en impagos y seguir aquella estrategia que consideren más recomendable, así como ajustada, al caso en cuestión. En Ancla Abogados llevamos más de treinta años acompañando a nuestros clientes, sirviéndoles de guía, para que sus derechos siempre se encuentren protegidos.