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Patria potestad: regulaciones y precisiones

patria potestad

¿Qué es la patria potestad?

La patria potestad es un concepto legal clave en la relación entre padres e hijos. A través de ella, se definen los derechos y responsabilidades que tienes como padre o madre respecto al cuidado, protección y decisiones importantes sobre tus hijos menores. Pero, ¿conoces bien cómo funciona la patria potestad y qué implica? A lo largo de este texto, vamos a explicarte de manera clara y sencilla qué es, cómo se regula por ley, cuáles son tus derechos y deberes y qué sucede si no puedes ejercerla. También veremos qué ocurre en situaciones especiales, como la falta de uno o ambos progenitores.

Regulación de la patria potestad

La regulación de la patria potestad aparece en el artículo 154 del Código Civil y viene concedida legalmente en beneficio de los hijos.  

La patria potestad, como responsabilidad parental, se ejercerá siempre en interés de los hijos, de acuerdo con su personalidad, y con respeto a sus derechos, su integridad física y mental. 

Esta función comprende los siguientes deberes y facultades: 

  1. Velar por ellos, tenerlos en su compañía, alimentarlos, educarlos y procurarles una formación integral. 
  2. Representarlos y administrar sus bienes. 

La inobservancia de estos deberes, de forma constante, grave y peligrosa para los hijos, ha de provocar su privación, temporal, parcial o total.

¿Cuáles son las características de la patria potestad? 

La institución de la patria potestad reúne, entre otras, las siguientes características: 

a)  Se ejercerá siempre en beneficio de los hijos. Ello supone que el interés de los hijos primará siempre sobre cualquier otro. Este principio, recogido en el Código Civil, ha venido desarrollándose de forma extensa en toda la normativa que sobre la protección de los menores. 

b)  Se debe ejercer teniendo en cuenta la personalidad de los hijos. De nuevo el interés del menor y el cuidado de las características de los hijos han de ser determinantes en el ejercicio de la patria potestad sobre los mismos, atendiendo a sus rasgos de personalidad. 

c)  Su ejercicio deberá respetar los derechos de los hijos, así como su integridad física y mental. Debe destacarse la introducción por el legislador de los derechos de los menores, y del respeto que han de cumplir los progenitores a la integridad física y mental de los hijos. 

d)  Es un derecho-deber inherente a la paternidad-maternidad sobre los hijos. De este modo va directamente ligado con el hecho de ser progenitor sobre los hijos, bien de forma biológica o por adopción, pues las funciones que implica dicha figura pueden ser desarrolladas por otras personas o entidades, pero nunca con la denominación de patria potestad. 

e)  Es un derecho irrenunciable e indisponible. Los progenitores no pueden transigir ni sobre su ejercicio ni sobre su titularidad. Solo por causas graves de incumplimiento de los deberes inherentes a su ejercicio, podrá el juez por medio de sentencia, privar a uno o a ambos de su derecho sobre los hijos.

¿Quién ostenta su titularidad? 

Primero, si uno de los padres fallece o no puede encargarse, el otro padre se hará cargo de todo. Pero si no hay ninguno de los dos, se necesita un tutor. El juez es quien elige al tutor, pero los padres pueden dejar escrito en un documento legal (como un testamento) a quién quieren que cuide de sus hijos o a quién prefieren que no lo haga. Aunque el juez tiene la última palabra, suele respetar lo que los padres hayan decidido, siempre y cuando sea lo mejor para el menor.

¿Qué comprende? 

La patria potestad, como responsabilidad de los padres, abarca una serie de deberes y derechos que van más allá de lo básico. Implica cuidar, proteger y estar siempre presentes para tus hijos, tanto en su bienestar físico como en su crecimiento emocional, educativo, moral y social. Es una responsabilidad completa que cubre todas las áreas de la vida de los menores.

Este conjunto de derechos y deberes es fundamental para asegurar que los hijos estén protegidos durante su minoría de edad, ya que se considera que hasta alcanzar la mayoría de edad no pueden valerse por sí mismos.

El cumplimiento de estos deberes por parte de los padres no solo determina el ejercicio de la patria potestad, sino que también influye en las relaciones entre los progenitores y, lo más importante, en la relación con los propios hijos. Cada decisión que tomes en este marco legal tiene un impacto directo en su bienestar.

Se establecen los siguientes deberes: 

a)  Obligación de velar por los hijos. 

b)  Obligación de tenerlos en su compañía. Los hijos menores deben vivir en compañía de sus progenitores, pues la convivencia con los mismos es la forma adecuada prevista para poder atenderlos y velar por ellos. Solo en determinados supuestos de imposibilidad por parte de los progenitores, se puede ceder la guarda de los mismos a un tercero o a una entidad pública. 

c)  Obligación de educar a los hijos y darles una formación integral. 

d)  Obligación de alimentarles. La obligación de alimentos a los hijos, regulada en numerosos preceptos, va mucho más allá de la regulación de los alimentos entre parientes prevista en el artículo 142 del Código Civil.  

e)  Obligación de representarlos y administrar sus bienes.

¿Cuáles son los motivos de privación de la patria potestad? 

La causa de privación de la patria potestad es el incumplimiento de las obligaciones inherentes a la misma. No obstante, para que dicho incumplimiento justifique la adopción de tal medida, deben darse ciertos requisitos: 

Incumplimiento habitual, reiterado y permanente  

La patria potestad existe para proteger a los hijos, por lo que su retirada, ya sea total o parcial, es algo que solo ocurre en casos muy graves. Para que esto suceda, deben concurrir razones poderosas y justificadas que demuestren que el incumplimiento de los deberes parentales ha sido grave y ha puesto en peligro el bienestar del menor.

¿Qué significa incumplir de manera grave?

Esto ocurre cuando el progenitor no cumple de manera habitual, reiterada y permanente con sus responsabilidades. Este desentendimiento debe ser algo que se mantenga en el tiempo, afectando de manera peligrosa al hijo. No se trata de errores puntuales, sino de una falta constante en las obligaciones hacia el menor.

Para que un juez considere esta situación, el incumplimiento debe haberse prolongado durante varios años, mostrando una clara falta de interés o responsabilidad. Estos incumplimientos pueden ser tanto en el ámbito económico como en el afectivo.

Incumplimiento voluntario

Para que se pueda retirar la patria potestad, el incumplimiento de los deberes debe ser voluntario. ¿Qué significa esto? Que si un padre o madre no puede cumplir con sus responsabilidades por causas ajenas a su control, como una enfermedad grave o una estancia en prisión, no se considera motivo suficiente para quitarles la patria potestad.

En estos casos, la falta de cumplimiento no es por desinterés o negligencia, sino por circunstancias que no dependen del progenitor.

Incumplimiento grave

Definir lo que se considera un incumplimiento grave no siempre es sencillo. La ley no ofrece una explicación precisa, y es por eso que los jueces aplican esta medida de manera muy restrictiva. Solo en situaciones donde el bienestar del menor está seriamente comprometido se puede considerar retirar la patria potestad por incumplimiento grave.

Esto significa que no cualquier falta de los padres justifica esta medida.

En beneficio del menor

Se exige que la privación de la patria potestad se realice en beneficio del menor. Al entender la jurisprudencia que la privación de la patria potestad es una medida excepcional que solo puede acordarse en determinadas circunstancias graves, solo debe adoptarse cuando sea necesaria para la defensa de los intereses de los hijos, pues no se trata de una medida sancionadora hacia los progenitores por el incumplimiento de sus deberes, sino de una solución judicial prevista para proteger a aquellos de los perjuicios que les suponga la dejación de los deberes de sus progenitores.

Tipos de privación de la patria potestad 

Existen varios tipos de privación de la patria potestad: total, parcial y temporal. Cada una de estas medidas se toma solo en casos excepcionales, siempre con el objetivo de proteger al menor.

Es importante entender que la privación de la patria potestad no es una consecuencia automática del incumplimiento de los deberes parentales. Se trata de una opción que solo se aplica cuando las circunstancias del caso lo justifican y siempre pensando en lo que sea mejor para el niño.

Privación total

Este es el caso más grave. Si, tras analizar la situación, se determina que la relación del progenitor con el menor es tan perjudicial que es mejor eliminarla por completo, se ordena la privación total de la patria potestad. Esto solo sucede cuando el incumplimiento de los deberes es grave y reiterado.

Privación parcial

En algunas situaciones, se puede optar por una privación parcial, donde uno de los padres pierde ciertos derechos sobre el menor, pero no todos. Esto suele ocurrir cuando hay un conflicto en la administración de bienes o en decisiones específicas, y se considera que es mejor que solo uno de los progenitores las gestione.

Privación temporal

La privación temporal ocurre cuando el tribunal cree que la patria potestad puede ser recuperada más adelante. Si las circunstancias que llevaron a la privación cambian y se considera que es beneficioso para el menor, el progenitor puede volver a ejercerla. Aunque parece definitiva al principio, esta privación se aplica pensando en que puede revertirse si la situación mejora.

¿Se puede ceder patria potestad de un hijo?

La patria potestad no es solo un derecho, también es un deber que tienes como padre o madre, siempre enfocado en lo mejor para tus hijos. Por eso, es irrenunciable, aunque, como ya lo hemos comentado, podrías perderla si no cumples tus responsabilidades de forma reiterada.

Aunque no puedes ceder la patria potestad, es posible que solo uno de los padres la ejerza con el consentimiento del otro. Eso sí, ¿sabías que puedes llegar a un acuerdo para que solo tú o la otra persona tome las decisiones importantes sobre tus hijos? Esto está contemplado en el artículo 156 del Código Civil, lo que te permite organizar el cuidado de tus hijos de la manera más adecuada para tu situación.

¿Tienes dudas sobre la patria potestad? 

Si te ha surgido alguna duda sobre cómo funciona la patria potestad o si estás atravesando una situación en la que necesitas orientación legal, no te preocupes. Nuestro equipo de abogados especializados está aquí para ofrecerte el mejor asesoramiento en todo lo relacionado con los derechos y deberes como padre o madre. Ya sea que necesites entender mejor tu situación o resolver cualquier consulta sobre acuerdos, privaciones o ejercicios de la patria potestad, estamos a tu disposición para responder todas tus preguntas.

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